La comunicación oral es una de las competencias más importantes para el desarrollo social y de equilibrio personal de los niños y jóvenes. En los últimos años se ha hecho evidente que esta competencia se desarrolla en el contexto familiar, escolar y comunitario, interactuando con las personas presentes en estos entornos. El texto enfatiza la relevancia de las actividades diversas que se llevan a cabo en la escuela con los compañeros, con los docentes y otras personas presentes en este contexto, para continuar aprendiendo a lo largo y a lo ancho de la vida, y desarrollando otras competencias. Desde una perspectiva pragmática y dialógica, el libro incluye propuestas de evaluación de las interacciones comunicativas y lingüísticas en las que los aprendices participan en el contexto escolar inclusivo, así como propuestas de intervención colaborativa para mejorarlas. El texto incluye instrumentos útiles para profesionales de la educación, la logopedia, la psicología y la psicopedagogía que estén dispuestos a reflexionar sobre su práctica y a cambiarla, con el fin de contribuir mejorar la competencia oral de los aprendices, para facilitar que puedan continuar aprendiendo, creciendo y progresando como ciudadanos con pensamiento crítico y dialogante